¿Cuáles fueron los motivos de la contundente derrota española en la Guerra de Cuba de 1898? Desde un punto de vista geoestratégico, el periplo de la flota del almirante Cervera lo refleja perfectamente: “demasiado lejos” y “demasiado poco”. España no tenía con qué defender sus colonias de un enemigo mucho mejor situado con respecto a ellas, a pesar de que las fuerzas armadas estadounidenses no fueran muy superiores. Operacionalmente hablando, España se enfrentó, además, a la necesidad de defender no solo el inmenso perímetro de la isla frente a un eventual desembarco, sino también el interior contra una guerrilla bastante efectiva y muy presente, sobre todo, en las provincias orientales. Solo tácticamente pudieron los derrotados superar a su enemigo. Armados con rifles modernos y capaces de dar una cadencia de fuego que llevó a los norteamericanos a pensar que utilizaban ametralladoras, los soldados españoles se defendieron con bravura, tanta que, tras haber ocupado los Altos de San Juan, cundió el pánico en el mando estadounidense ante la eventualidad de un contrataque español.