En el mundo de los vivos, los ejecutores se encargan de poner fin a una vida, normalmente a golpe de hacha o en la horca. Los verdugos de los Reinos Mortales que dan muerte conscientemente a inocentes así como a culpables atraen la mirada de Nagash, y al morir adoptan la forma espectral de los Lord Executioners. Cada uno lleva una enorme hacha decapitadora, con la que se le ordena que mate a héroes, campeones, reyes y cualquiera que desafíe las leyes de Nagash, mientras es sermoneado por los espíritus de los inocentes a los que ejecutó durante su vida; unas almas que irónicamente protegen al Executioner ante el peligro, no por caridad, sino por su incapacidad de escapar.